Del texto “La hoja y el viento”:
Patricia May
(12 de Abril de 2008)
“Quizás [...] una de las cosas más importantes que vamos aprendiendo a medida que maduramos es que no tenemos las cosas controladas, que la vida es tan múltiple y creativa que es imposible tenerlo todo calculado, que siempre nos sorprende con situaciones no esperadas, muchas veces ni siquiera imaginadas…”
[...] “El ritmo de todo se ha acelerado y ello trae mutaciones constantes en todas las áreas del vivir.
Las cosas están siempre cambiando más allá de nuestro control, deseos, expectativas, la vida nos sorprende gratamente a veces, otras nos arrolla, revuelca, duele con lo inesperado…”
[...] “A veces tenemos la sensación de estar inmersos en un caos, de ser hojas movidas por el viento [...] no somos capaces de leer el texto global del sentido de los procesos, porque sólo vemos letras, o frases, no el libro, sólo vemos árboles y no el bosque, sólo partes y no la totalidad en que estas adquieren sentido.
Quizás algún día despertemos y veamos que somos la hoja y también el viento y podamos oír la música de fondo, el sutil murmullo que impulsa a la vida, nuestra vida y ver el diseño, el orden, la tendencia impecable que impulsa al aparente desorden y sin sentido del cambio...”